Cuento de amor y amistad: ¡Sentirás mariposas en el estómago!

Alguna vez te ha sucedido que el cuento de amor y amistad que has experimentado parece ser narrado con palabras que se nos escapan y nos hacen delirar de emoción. Aquí, te adentrarás en una crónica llena de romanticismo y afecto, la cual te hará sentir mariposas en el estómago y te sacará más de una sonrisa.

Capítulo uno: El comienzo

Érase una vez en una pequeña aldea, dos jóvenes de corazón bondadoso y espíritu alegre que cultivaron una entrañable amistad desde que eran unos niños. Sus nombres eran Laura y Nicolás. Aquellos dos navegaban con soltura en la vida, sonriendo aunque los días estuvieran nublados y las noches fuesen largas. Aunque la vida era a veces un enigma, ellos no dejaban que las vicisitudes atentaran contra el tesoro de su amistad, pues hallaban solaz el uno en el otro en momentos de dificultad.

Capítulo dos: El cambio

Como una apacible brisa, el tiempo pasó y dimensionó la impalpable barrera que inexorablemente separa la infancia de la adultez. Fue en ese instante que brotaron emociones distintas, cual chispas de deseo y pasión en el fondo de sus corazones. El cuento de amor y amistad mutó hacia una aventura en la que el afecto tierno de siempre se mezclaba con el amor que apenas germinaba.

Capítulo tres: Confesiones y momentos de hesitación

Un día, bajo el esplendor de un crepúsculo límpido, Laura y Nicolás se hallaban paseando sobre la tersa arena de aquella playa de su adolescencia. Aunque el silencio parecía cómplice, ambos balbuceaban aquellas palabras que se les enredaban en la garganta congelándose hacia el exterior como niebla en invierno.

- Nicolás, hay algo que me gustaría comentarte – mencionó Laura con cierto nerviosismo.

- Claro Laura, tú dime, ¿qué ocurre? – respondió Nicolás, extrañado pero expectante.

- Verás, deseaba expresarte desde hace tiempo que algo en mi alma ha cambiado – Laura hizo una pausa en su discurso y contempló a Nicolás – ya no veo en ti solamente al amigo que conocí de niña, sino al hombre que me hace sentir mariposas en el estómago y con quién mi corazón vibra al unísono.

El rostro de Nicolás se ruborizó y sus ojos titilaron con emoción, pues él también sintió el llamado de una historia de amor y amistad que comenzaba a desbordarse en una corriente de amor ineludible y arrebatador. Compartió con Laura lo que sucedía en su pecho y así, ambos decidieron explorar juntos este viraje del destino.

Capítulo cuatro: Un nuevo horizonte

Muchos años se desvanecieron y los dos jóvenes continuararon su andanza. Su amor fue una fuente de felicidad que compartieron y transmitieron a quienes los rodeaban. Ellos comprendieron que aunque las emociones tienen matices diversos y cambian con el transcurso del tiempo, el vínculo que crearon supo adaptarse y alcanzar aquel obsequio llamado amor eterno, aquel que se nutre de amistad y comprensión. Fue así como su amor maduró, y su experiencia se convirtió en un fascinante cuento de amor y amistad.

Este cuento es el reflejo de esas historias de parejas que supieron ser amigos antes de ser amantes. Donde la confianza y empatía pavimentaron el camino hacia un amor verdadero y duradero. Vive y comparte tu propio cuento de amor y amistad, y quizás tú también puedas ser protagonista de una historia que haga palpitar tu corazón de felicidad.